Bailando con luz: una entrevista con Gundula Blumi

Tomó su primera foto hace mucho tiempo sin saber que le cambiaría la vida para siempre. Sus fotografías son misteriosas y bellas, algunos incluso dicen que tienen un toque de oscuro, pero ella disfruta jugando con la luz. Nunca deja de experimentar con varias técnicas como las exposiciones largas, agua y vidrio.

Su habilidad para reconocer las emociones de otros le han ayudado a llevar su fotografía más allá y explorar aún más. En esta entrevista con nuestra revista, Gandula habla sobre lo que le fascina más de la fotografía y cómo ha evolucionado su estilo fotográfico a través de los años y que hace cuando no está haciendo fotos.

© Gundula Blumi

”Me fascinan las partes más oscuras, malvadas y melancólicas de nuestra personalidad”.

¿Te acuerdas de la primera vez que cogiste una cámara para hacer tu primera foto? ¿Fue ahí cuando sentiste que querías hacer fotos? ¿Ha cambiado tu estilo con los años?

Mis primeras fotos fueron en el interior de nuestra casa. Mi madre me había prestado su cámara y yo podía tomar 10 fotos. Recuerdo las “mariposas en el estómago” cuando comenzaba a buscar que disparar ya que tenía que elegir con cuidado. Siempre eran cosas banales las que disparaba, por ejemplo las escaleras de mi cuarto, pero para mi tenían una conexión. Sitios que estaban presentes en mi vida diaria y que simbolizaban seguridad y hogar. El mejor momento para mi era tener esas imágenes en mis manos impresas. Me fascinaba ver mis fotos en papel. Ahora tengo esa misma sensación cuando pongo la tarjeta SD en el ordenador tras una sesión. Cuando tenía 10 o 11 conseguí mi propia cámara y desde ese día intenté capturar todo mi mundo: Amigos, vacaciones, mi vida diaria, sitios importantes… En retrospectiva encuentro que hice elecciones interesantes, pues dicen algo sobre como un crío percibe el mundo. Como adolescente para mi era muy importante capturar este nuevo y grandioso mundo lleno de expectativas y momentos emocionales que compartía con mis mejores amigos. En esta edad empezamos a hacer sesiones. Nos encantaba vestirnos y probar distintos roles que era lejanos a nuestra vida diaria.

Después descubrí la fotografía de lugares bellos, edificios, paisajes y cosas que me gustaban. Pero un día me aburrí de capturar imágenes reales pues dependían de lo que me rodeaba. Así que decidí crear mi propia realidad. Un día tomé una foto a través de una jarra de agua que estaba sobre la mesa y ahí comenzó mi amor por experimentar. Desde entonces me dedico a crear cosas nuevas y me encanta sorprenderme.

© Gundula Blumi

En tus fotos capturas momentos surreales que provocan distintas emociones. ¿Cómo lo consigues cada vez? ¿Crees que la inspiración es la respuesta?

Si, yo creo que la inspiración es un requisito para crear algo. Solo puedo tomar fotos cuando tengo una impresión especial o una emoción. Hay días en los que estoy completamente vacía y en estos días no tiene sentido hacer fotos. No importa todo lo que intente, no funciona. Puede ser muy frustrante. En otros días tengo una idea viendo o escuchando algo. Me inspiro en una gran variedad de cosas, desde una persona, una cara o un texto. Tengo que estar de buen humor y lista para trabajar. Uso distintas técnicas para crear fotos, agua, color, luz y vidrio. Me gusta trabajar con nuevos efectos para cambiar una imagen, Para mi es como darle un nuevo rol, como jugar. Es como sacar esas partes de la personalidad que normalmente no salen. También me inspiran mis amigos y familiares y la gente con la que trabajo. En mis fotos a veces nos hay caras reconocibles, algunas imágenes están borrosas o distorsionadas para que sean anónimos. Lo más importante es pensar si la imagen evoca algún sentimiento a quien la ve.

© Gundula Blumi

¿Cómo te sientes cuando miras tu trabajo anterior? ¿Estás descubriendo algo nuevo sobre ti mismo?

Si, ahora soy capaz de ver mis fotos “desde afuera”, con una cierta distancia, ya no estoy “dentro” de las fotos, asi que puedo entender mejor cómo me sentía cuando las cree. Ahora reconozco mi realidad interna y cómo percibía las cosas en ese tiempo, pues ahora he cambiado. Hace algunos años me sorprendía cuando la gente me decía que mis fotos parecían oscuras y deprimentes. Nunca me sentí así, quizás fue algo inconsciente. Pero algo ha cambiado, y ahora estoy de acuerdo con la gente. Comparado con cómo me siento ahora, me sentía muy perdido, desorientado y tímido en ese entonces y tenía este impulso por esconderme, quizás pues atravesaba un tiempo dificil y lleno de cambios.

Hoy en día tengo otras emociones básicas y otro punto de vista sobre la vida y estoy contento sobre este desarrollo personal. Siento que es muy emocionante y refleja la realidad interna del artista. Sin estar al tanto de ello, ahora elijo y uso tecnicas especiales, colores y estilos que se basan en lo que estoy viviendo y pensando. En mis imágenes actuales trato de trabajar con distintos tipos de luz, que le dá este efecto de transformación. Y amo los colores, un color fascinante es muy dulce para mi. Antes solía crear mis imágenes con algunos pocos y decentes colores, eso ha cambiado. Las caras irreconocibles siguen siendo importantes para mi, pero en una forma distinta. Las fotos ya creadas, muestran una parte del proceso interno en el tiempo en el que me encontraba. Es muy interesante ver cómo las percepciones cambian con la vida y creo que aprendes de cada una de tus fases una vez que las cierras y comienzas una nueva, de esa manera puedes comparar.

¿Cuando buscas inspiración, siempre la encuentras dentro de ti mismo, o miras a tu vida diaria, la gente que conoces o las emociones que estás experimentando en ese momento?

Para mi es muy importante recibir distintas maneras de ver la vida desde afuera que ayuda a crear ideas dentro de mi. De vez en cuando necesito distraerme, necesito escaparme de mi mismo, de mi rutina y así me siento renovado. Me encanta lanzarme a la vida colorida de Berlín y sus aventuras escondidas y dejarme sorprender por su energía, la variedad de posibilidades, estilos de vida y puntos de vista. Pero también necesito un poco de paz y tiempo para mi. Necesito esos días tranquilos para procesar todas esas experiencias, grandes o pequeñas, pues sólo así puedes enriquecerme e inspirarme, sino me sentiría muy estresado y las experiencias no tendrían ningún sentido. Amo caminar a través de las calles de Berlín, sobretodo al despertarme por la mañana. Me gusta descubrir lugares y distritos que no conocía. Y así es como seguido observo esos detalles que me inspiran.

Recientemente he visto una ventana doble ligeramente abierta con una vieja cortina que tiene ahí colgada mucho tiempo, o al menos eso parece. Además de que es una imagen muy chula, pienso cuál sería la historia detrás de esas viejas cortinas. Este pensamiento me puso en un cierto estado de ánimo. Me fascinan las imágenes que me recuerdan lo frágil que es la vida que da miedo y es hermoso al mismo tiempo. A veces los colores ayudan a darme más ideas para fotos. Recientemente estaba caminando por los Alpes y ese mar de flores azules me ponen mi imaginación a volar. Y me gustan las distintas formas de luz que por ejemplo transforman cuando miras el sol con ojos medio abiertos. A veces me molesto pues quiero una imagen en específico en un momento y desafortunadamente no es posible. Y esos sueños que parecen realidad y qué vas del sueño a la realidad y al final no sabes qué fue lo que realmente pasó. Me fascinan esos sueños y sus realidades inherentes.

© Gundula Blumi

¿Crees que la empatía tiene un gran rol en tu fotografía, pues eres muy bueno en reconocer las emociones y capturarlas en fotos?

Si, creo que soy una persona que es capaz de reconocer las emociones de otras personas y seguido estoy influenciado por el estado anímico de otras personas que puede ser muy cansado. Pero por otro lado me alegro de poder hacerlo pues lo necesito para mi trabajo con las personas con discapacidad mental. Muchos no son capaces de comunicar sus emociones y necesitan ayuda con la manera en la que hablan, se comunican en una manera muy distinta. Pero como ya he dicho, a veces me siento sobre estimulado y hasta confundido por tantas impresiones y estados de ánimo y después no puedo interpretar nada. En estas situaciones necesito más tiempo para mi en mi apartamento donde puedo crear imagenes y probablemente puedo procesar esa cantidad de sensaciones al hacer fotos. Me ayuda a aclararme y ordenar mi mente.

© Gundula Blumi

¿Cuál es tu técnica favorita para utilizar cuando estás en proceso de hacer una foto? ¿Te gusta combinar técnicas diversas para conseguir un resultado diferente?

Me gusta experimentar con varios métodos y filtros. Yo juego con la luz y las largas exposiciones, con vidrio, agua, y color, así como experimentar con los bordes. Me gusta cada técnica que esconde algo en las imágenes y que da un espacio para la fantasía. Normalmente tengo una técnica especial para cada periodo del día y de esta forma puedo crear una serie de imágenes. Después de un tiempo me quedo sin ideas y siento que la técnica está “muy usada”. Pero es gracioso, siempre que me siento mal, se me ocurre ona una idea y un nuevo método para la próxima vez y me gusta experimentar. A veces combino distintas técnicas. Después de unos años he pasado mucho tiempo experimentando con las fotografías impresas y agua y a veces gotas de agua y acuarelas. Esa fue mi primera técnica y me fascinó durante mucho tiempo el tomar la fotografía en el momento clave. Las gotas de agua o ver como caía el color en el agua durante un momento y tenía la ambición de capturar el momento perfecto con la cámara.

© Gundula Blumi

¿Qué es lo que más te gusta de la fotografía?

Para mí el efecto fuerte de de la fotografía es fascinante. Originalmente la foto muestra la realidad visual frente a la cámara y aunque todos saben que en la actualidad una foto puede ser todo, el sentimiento aún dice: “Una foto es un documento de la realidad”. Por esa razón las fotos surreales – o me gustaría más decir “fotografías basadas en un procedimiento” – tienen este efecto, pues lo surreal a veces parece lo real. Creo que una foto es más cercana al que la mira que una pintura. Cuando ves una pintura sabes que el pintor no tenía restricciones en su proceso, podía pintar lo que quisiera y cualquier motif era posible y una foto aún tiene una “posición” de una obra de arte. Pero crear fotografías como yo lo hago es casi como los pintores. El pintor mezcla y usa colores y yo mezclo y uso métodos fotográficos para crear una imagen.

© Gundula Blumi

Una de tus series llamada Identidades Frágiles implica que hay varios estados de la personalidad humana y que posiblemente todos tenemos caras ocultas bajo la superficie. ¿Fue eso lo que te hizo hacer esta serie de fotos, y qué fue lo que te influenció al hacerlas?

Creo que no estaba al tanto de lo que me hizo crear esta serie. Estaba experimentando y todas las imágenes tenían este estado de ánimo similar. Solo en retrospectiva pude ver esas imágenes oscuras y terroríficas y pensar cómo representaban esa atmósfera. Vi las imágenes con cierta distancia a mi mismo y descubrí que tenía muchas emociones inconscientes en la época en las que las imágenes les daban vida. Recuerdo que alguien me preguntó por qué siempre “quemaba las caras” de las personas y pensé en eso, pero no tenía respuesta, solo que me gustaba la estética de tanta luz brillante en los rostros. Pero siempre hay una razón especial para encontrar algo hermoso. Así que las caras escondidas o irreconocibles simbolizan un escape y que hay algo bajo la superficie que no puedes ver. Me fascina las partes oscuras, melancólicas y extrañas de nuestras personalidades.

¿Qué le dirías a tu yo más joven cuando comenzó con la fotografía? ¿Le recomendarías que hiciera algo diferente?

No, la verdad no. A veces creo que podría haber hecho algo mejor cuando miro las imágenes antiguas, pero al momento siguiente pienso que en ese momento es lo que sentía y necesitaba expresara través de ellas y no tenía más posibilidades. Tienes que pasar por varios procesos o de otro modo no puedes desarrollarte. Fue un proceso personal llegar a poder experimentar como lo hago ahora. Y si los momentos en medio no existieran, no podría comprender lo que hago ahora.

© Gundula Blumi

Ya que tu trabajo se trata de combinar distintas técnicas, ¿dirías que te gusta trabajar con digital y analógico?

En este momento estoy probando una vieja cámara analógica de mi abuelo y de vez en cuando hago fotos con la primera cámara que tuve. Es otra manera de ver las cosas cuando sabes que solo tienes unas cuantas fotos para un motif, pues de otra forma sería muy caro. Esa manera de hacer las cosas puede ser divertida sobre todo si tienes una bolsa con fotos recién reveladas y sabes que dentro de poco las verás. Pero en mi caso, mi poca paciencia es el problema. Odio esperar. Y un problema aún más grande es el límite, tengo que parar (y muchas películas son muy caras…). Yo necesito experimentar sin fronteras, sino no soy feliz. Peor me gustaría revelar fotos yo misma y experimentar con eso. Desafortunadamente no he tenido tiempo de aprenderlo.

Es obvio que tu fotografía tiene un impacto en la gente que te rodea. ¿Cómo te influenció como una persona y una artista?

La primera vez que me pidieron que escribiera un artículo sobre mi trabajo, me dí cuenta de que no había pensado sobre mi trabajo hasta ese momento. Me encontraba pensando sobre mi y mi arte, y comencé a pensar que estaba haciendo (y encontrar la respuesta) fue difícil. Soy una persona que piensa mucho en varias cosas, pero cuando me pongo a pensar en mi fotos me bloqueo. No tengo un plan definido cuando experimento, creo que es más del subconsciente. Pero como la gente me pide que comunique mis pensamientos también tengo que reflexionar sobre mi arte y crear mis imágenes de una manera más consciente.

© Gundula Blumi

¿Puedes descubrir un día en la vida de Gundula Blumi?

Vale, te describiré un dia libre, cuando no tengo que trabajar. Suelo caminar por mi barrio con un café en la mano tras levantarme. Me gusta cuando es temprano y el día aún es “jóven y fresco”, se siente como si cualquier cosa pudiera pasar, todas las opciones para el día aún siguen abiertas. Cuando estoy otra vez en casa desayuno y después hago cosas importantes o trabajo en mis fotos. Por la noche me veo con mis amigos, ahora que es verano me gusta sentarme con una cerveza en un lago o en algún parque. Es genial cuando comenzamos a tomar fotos. Hay un sitio super chulo en mi parque favorito en Berlín donde quedamos a menudo. Cuando el sol se pone, es hermoso y la luz intensa brilla en esa parte del parque. Después tomamos más fotos.


Todas las fotos utilizadas en este artículo han sido con el permiso de Gundula Blumi. Si quieres ver más siguela en Tumblr e Instagram.

escrito por Ivana Džamić el 2016-09-26 #gente

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